Poción rejuvenecedora
INTRODUCCIÓN
Bueno, esta de aquí es la poción más demandada por las mujeres del reino y la correspondiente al tercer cuento descubierto, El herborista y el Sirzan. Se trata de la poción rejuvenecedora. Afortunadamente, y por más que le pese a la señora Glíria, vive en la biblioteca una Sirzan (sus plumas son el ingrediente fundamental para su elaboración y, dada su escasez, es casi un milagro que la podamos fabricar). Sin embargo, mucho cuidadito con beber demasiada, que en vez de hacer desaparecer esas arruguillas y patas de gallo que tanto os molestan, acabaréis con la apariencia de un niño y regresar al estado adulto es un auténtico suplicio (os lo digo por experiencia).
Bien, veamos con más detalle la poción.
INGREDIENTES
3 plumas de Sirzan.
**Debido a los pocos ejemplares que quedan de dicha ave, se recomienda recurrir al soborno para lograr sus preciadas plumas (las semillas de Mirdrun es la mejor moneda de cambio).
15 semillas de Mirdrun peladas.
5 hojas de Nirus (preferiblemente recolectadas al comienzo de la primavera).
2 jarras de babas de Bulgia.
PREPARACIÓN
Introducir las hojas de Nirus en las babas y dejar macerar durante al menos dos meses.
Pasado dicho tiempo, triturarlo todo y calentarlo a fuego muy lento durante nueve horas.
Cuando sea casi imposible sacar la cuchara de las babas, picar las semillas y añadir.
Dejar cocer dos horas más.
Quemar las plumas de Sirzan y añadir sus cenizas al preparado.
Remover bien hasta que la mezcla se vuelva dorada y estará lista.
USO
Una gota bastará para que el sujeto rejuvenezca. El efecto dura un día.
ADVERTENCIA
Su uso excesivo puede provocar que el sujeto regrese a sus primeros años de vida.
No es un estado irreversible, pero cuando los efectos pasen, el brusco crecimiento de los huesos causa unos dolores insoportables.
SABOR
A semillas de Mirdrun.
CUENTO O EVENTO CON EL QUE ESTÁ RELACIONADO
La poción rejuvenecedora está relacionada con el cuento de El herborista y el Sirzan.